Rio Xallas, Ezaro y la electricidad

Ezaro es una pequeña población situada en plena Costa da Morte, provincia de la Coruña, en Galicia, al noroeste de España, pertenece al ayuntamiento de Dumbría. Y para su desgracia tuvo en su día una hermosa cascada, que a pesar de lo que digan los organismos oficiales y personas ingenuas y románticas no es la única de Europa que cae al mar, primero porque hay más que lo hacen, en Noruega por ejemplo, también en Escocia, y segundo porque el mar aún está a cierta distancia. Claro que en esto la cosa tiene su truco, si la cascada no funciona y probamos el agua que está al pie de donde tiene lugar la caida del agua vemos que es agua salada, alguno, incauto, dirá ¡oh es el mar! Nada más lejos de la realidad, en cuanto la cascada se pone en marcha, a los pocos segundos, la fuerza del agua y su caudal convierten esa agua en dulce, totalmente dulce y por cierto, con bastante mal sabor, si la cascada fuese constante, como debería de ser, esa zona sería río tendría siempre el agua permanentemente dulce, ni más ni menos, el mar está aún como dos kilómetros después siguiendo el cauce.

Ezaro desde el mirador que se encuentra un poco más arriba de la cascada.

Otra vista de Ezaro desde el mirador, al fondo vemos el Cabo Finisterre

Y es que ese es el quid de la cuestión, la cascada de Ezaro funciona a ratos. Hoy en día Ezaro  y toda la humanidad sigue disfrutando de esa cascada pero de una forma muy artificial: cuando así lo desean las centrales hidroeléctricas que están instaladas curso arriba del río Xallas. Existe para esto un horario especifico y si alguien quiere disfrutar del maravilloso espectáculo que resulta de ver una caida de agua semejante tiene que ir en ese horario, que la verdad es más bien escaso y durante muy pocos días al año.

Al fondo debería de haber una catarata, está cortada.

Pasarela de acceso al pie de la cascada de Ezaro

La fosa donde desemboca la cascada

¡Abrieron la cascada!

Cuando visitamos Ezaro, y concretamente esa cascada, por un momento podemos pensar que estamos disfrutando de algo grandioso, un espectáculo natural de primer orden. Nada más lejos de la realidad, solo estamos disfrutando de una triste película de lo que podía haber sido y no es. 

Allá a por los años 60 del siglo XX, y por la empresa Ferroatlántica, se construyeron diversas centrales hidroeléctricas en el curso del Xallas, supongo que la electricidad hacía falta y la cosa de la ecología importaba poco tirando a nada, así que no lo dudaron, represaron el agua en embalses y la cascada quedó cortada de cuajo, el último embalse antes de llegar a ella es el que podeis ver en estas fotos inferiores, el de Santa Uxía, que se encuentra aproximadamente a 1'5 kilómetros de la cascada río arriba, cuando abren las compuertas de este embalse es cuando la cascada, durante media hora, brinda su majestuosidad al público, después la vuelven a cerrar.

Embalse de Santa Uxía

Desagüe del embalse de Santa Uxía, cuando lo abren permiten que vuelva a formarse la cascada del Xallas

Pero ver este pobre espectáculo no salió gratis, durante años, con el dictador Franco como jefe del estado nadie se atrevió a levantar la voz en contra de la supresión de la caida de agua, muerto este comenzaron algunos grupos ecologistas a protestar y a regañadientes, muy a regañadientes, autoridades y concesiones hidroeléctricas tuvieron a bien abrir, de cuando en cuando sólo, y muy poquito tiempo, la presa para que todos pudiesemos disfrutar de lo que jamás debió de desaparecer y esto sucedía ¡en el mes de Agosto del año 2000! dándose además una situación realmente esperpéntica, y esta si, posiblemente convierta en única a la cascada de Ezaro: Don Manuel Fraga Iribarne, por aquel tiempo presidente de la Xunta de Galicia, inauguraba la catarata, así que posiblemente es la única catarata del mundo que tiene una inauguración oficial. Fraga Iribarne, genio y figura, posiblemente sea el único político en el mundo que tuvo la ocurrencia de inaugurar, como si fuese lo más normal del mundo, un accidente geográfico  que lleva en el lugar millares de años.

 

Evidentemente tanto la presa de Santa Uxía como la central eléctrica que se encuentra al pie de la cascada, con todos los grandes tubos de canalización de agua que bajan de la montaña destrozaron para los restos lo que podía haber sido uno de los mejores parajes naturales de Galicia ¿podía haberle pasado algo peor a esa zona?

Si, claro que si, los seres humanos para destrozar todo lo que tocamos somos realmente únicos. Con el paso de los años se ve que la electricidad que generaba la energía del agua no llegaba así que no hace mucho llenaron también de molinos de viento las montañas que rodean Ezaro, no son cinco o seis molinos para aprovechar la energía eólica, está toda la cumbre de la sierra llena de ellos destrozando por completo el paisaje.

Molínos eólicos en los montes próximos a Ezaro, detrás de los molinos la mole rocosa del Monte Pindo, también conocido como el "olimpo gallego".

Puede que el viajero que visite la zona se pregunte por qué con semejante arsenal de molinos eólicos sigue la presa cerrada casi todo el año ¿no generan la corriente eléctrica suficiente para lo que consumimos? ¿no le llegaba a Ezaro con el destrozo sufrido en el río Xallas que también tuvieron que destrozarle sus montes?

No lo se, la verdad, tampoco se si hace falta tanta energía eléctrica o no se puede obtener de otras maneras, solo se que la Cascada de Ezaro y el paisaje que la circunda es hoy un triste espectáculo, un destrozo que beneficia a unos pocos y nos perjudica a todos y al que nadie parece querer poner remedio, una barbaridad contra la naturaleza reconvertida en espectáculo. 

Vista de la zona cuando nos vamos acercando, a la derecha de los tubos se encuentra la cascada, arriba... más molinos para generar energía "más" eléctrica usando el viento.

Es como si nos obligasen a escuchar la mejor sinfonía musical, con el mejor director a la cabeza de la mejor orquesta jamás vista y que a los músicos les obligasen a tocar con todos los instrumentos desafinados. Lo peor es leer, en la prensa tras la temporada veraniega, que es cuando se abre de cuando en cuando la cascada, que el ayuntamiento de Dumbría o los responsables de las centráles eléctricas se vanaglorian de la concurrencia de visitantes, que va en aumento año tras año dicen, no se si alguna vez pensaron y valoraron el número de visitantes que tendría ese ayuntamiento, esa zona, la parroquia de Ezaro, si la cascada funcionase todo el tiempo, como nunca debió de dejar de hacerlo.

Eso si, se nota que a cargo de todo esto se encuentran compañías hidroeléctricas, algunos días nos ofrecen otra migaja de este artificial y penoso espectáculo: iluminan toda la zona por las noches y en las fotos queda muy bien, pero no debemos de olvidar que esto, solo es una ilusión:

Cascada de Ezaro por la noche

La fuerza del agua

La cascada no cae al mar directamente, el río Xallas continuaría tranquilo su curso hacia él,  aún a unos dos kilómetros, si se lo permitiesen

Actualización a 18 de Mayo de 2011: En la cascada de Ezaro ya corre el agua de forma continua.